¿Recordáis un episodio de Los Simpson en el que el malencarado dependiente de la tienda de cómics, convertido en el malvado supervillano El Coleccionista, se dedicaba a secuestrar iconos del mundo del cómic y la ciencia ficción encerrándolos en bolsas para mantenerlos inmaculados y perfectos en una macabra colección de celebridades? Pues a algo así … Seguir leyendo